Querido amigo, la verdad es que hace poco tiempo que te conozco, hace pocos años comparados con todos los que he vivido yo, pero ¿Sabes? Parece que te conozco de toda la vida.
La primera vez que te vi pensé que solo me traerías problemas. Pronto me demostraste que estaba equivocado. Justo cuando me dejaron de lado aquellas personas a las que di tanto en el momento que me necesitaron, me di cuenta que ahora el estorbo no eras tú, sino yo. Sentía demasiada soledad y el único que estuvo ahí fuiste tú, dándome amor sin cuestionar por qué mi rostro era feo y áspero a causa de las arrugas o por qué me muevo tan débilmente y siempre tienes que adaptarte a mi ritmo. Lo importante es que sé estuviste conmigo porque quisiste, a ti te da igual el dinero, y el interés, te basta con una caricia, y la verdad, es que se te ve el mas feliz del mundo cuando lo hago. Y para que engañarnos, en realidad yo también lo sería si hiciesen lo mismo conmigo, pero bueno, te tengo a ti.
Nunca me ha gustado pasear, y menos solo, lo hago porque es bueno para mi, pero sobre todo, porque tengo al mejor compañero para caminar, y me encanta ver lo contento que te pones cuando me acerco a la puerta. Por todas estas cosas se que te necesito, que me necesitas, la primera vez en mucho tiempo que me he vuelto a sentir útil, y lo has conseguido tú, mi querido amigo, y sin pronunciar una sola palabra.
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